SAN JUAN, PUERTO RICO.- “Jesús vive en mí” con este mensaje Daddy Yankee, uno de los máximos exponentes de reggaetón en el mundo se despedía de la música y de la vida que le dio fama y reconocimiento en el planeta para dedicarse a transmitir la palabra de Dios.
Raymon Ayala, verdadero nombre del puertorriqueño, creció en el barrio Villa Kennedy Housing Projects con el sueño de convertise en un beisbolista, sin embargo sus planes no coincidían con los de Dios, pues el “chamaquito” fue alcanzado por una bala perdida de un rifle Ak-47 que le imposibilitó alcanzar su deseo de llegar a las grandes ligas.
Para ese entonces, Yankee hacía música pero como un pasatiempo, pero la recuperación por la bala que se alojó en su cadera tardó más de un año y medio, tiempo suficienre para poder concentrarse por completo en su carrera musical.
Fue con el disco Playero 34, del productor Dj Playero, que Yankee sonó por primera vez y desde ese momento hasta diciembre de 2023 el reguetonero conquistó el mundo entero con su música, colocó al género urbano en el radar y llenó estadios enteros y cambió la vida de muchas personas.
Un vacío
El dinero, la fama y el poder que Daddy Yankee logró durante su trayectoria musical de más de 30 años no fueron suficientes para llenar el vacío que siempre sintió.
En marzo de 2022, Yankee sorprendió a sus seguidores al anunciar que se retiraba de la música, por lo que inició una gira mundial para despedirse de todos sus fanáticos para finalmente disfrutar de todo lo que le habían regalado durante todos sus años.
Hasta el momento se desconoce en qué momento el “Big Boss” encontró su camino con Dios e inició su conversión completa al cristianismo.
Pues aunque nunca negó la existencia de Dios, sí sorprendió que el pasado 3 de diciembre durante uno de sus conciertos de despedida en el Coliseum de Puerto Rico anunciaba que de ahora en adelante su carrera y su vida estaría enfocada 100 por ciento al Señor.
“Mi gente, este día para mí es el más importante de mi vida. Y se lo quiero compartir, porque no es lo mismo vivir una vida de éxito que una vida con propósito”, comenzó diciendo.
“Por mucho tiempo intenté llenar un vacío en mi vida que nadie pudo llenar. Trataba de rellenar y buscar un sentido a mi vida. En ocasiones aparentaba estar bien feliz, pero faltaba algo para hacerme completo. Y les tengo que confesar que esos días terminaron”, aseguró.
Fue en este momento que reconoció que ese vacío se llenó gracias a que se encontró con Dios.
“Esta noche, reconozco y no me avergüenzo de decirle al mundo entero que Jesús vive en mí y que yo viviré para Él”, dijo mientras aguantaba un nudo en su garganta.
Por lo tanto, afirmó que de ahora en adelante su vida tendrá un nuevo comienzo para iniciar una nueva historia.
