El Codeh insta a la depuración de la policía, señalando que no han aprendido a realizar correctamente sus funciones.

Titulares

El presidente del Comité para la Defensa de los Derechos Humanos en Honduras (Codeh), Hugo Maldonado, manifestó que las recientes detenciones de agentes policiales son resultado directo de las denuncias de la ciudadanía, y reflejan una depuración policial ineficaz.

“Las consecuencias llegan cuando no se actúa como se debe”, comentó respecto al proceso de depuración que intentaba eliminar a los agentes implicados en corrupción y violaciones de derechos humanos.

Maldonado mencionó que a los agentes ahora detenidos se les atribuyen crímenes como tortura e implantación de pruebas, delitos que, indicó, no son aislados y se han replicado en otras unidades a lo largo del país.

“Conocemos casos en el norte del país donde a jóvenes inocentes les colocaron pruebas falsas de extorsión, simplemente por encontrarles 200 lempiras sobre una mesa”, explicó, destacando que estas detenciones son fruto de la denuncia activa de la ciudadanía.

“Uno de esos jóvenes acudió a los derechos humanos, al Ministerio Público y a la Dirección de Asuntos Disciplinarios Policiales, y ahora ha tenido que dejar el país”, añadió, criticando la actuación indebida de la policía.

Para Maldonado, es crucial que la depuración policial se enfoque en eliminar a aquellos agentes que no han logrado adaptarse a las prácticas correctas.

“Si los abusos policiales continúan ocurriendo incluso en los niveles más altos, significa que la depuración anterior fue deficiente. Ahora, corregir esto nos costará cientos de millones a los hondureños. Cuando las cosas se hacen mal, los resultados son igualmente malos”, concluyó.