La ex comisionada de Policía en condición de retiro, María Luisa Borjas, afirmó que el Ministerio Público (MP) solo cambio de partido político, pero se sigue en la misma “narcodictadura”, añadió que se engaña a la población con cifras sobre la reducción de violencia en el país.
“Tuvimos 12 años de un Ministerio Público que estaba al servicio de una narcodictadura, ahora solo cambiamos de bando porque estos están al servicio de otra narcodictadura”, acusó Borjas.
En tanto, apuntó que están haciendo “caso omiso” de los feminicidios aún y cuando está “supuestamente” en el poder una mujer que se comprometió a defender los derechos de las féminas hondureña.
No obstante, se retractó y dijo que la mujer “más violentada de sus derechos es la presidenta Xiomara Castro, que la mantienen viajando, pero quien manda es Mel (Manuel Zelaya). Imagínese como le usurpan su mandato y no tiene ni voz ni voto, la mantienen viajando en una serie de viajes infructuosos”.
La exdiputada del partido Libre, atribuyó la responsabilidad directamente a la máxima autoridad del país, que es “Manuel Zelaya Rosales y no Xiomara Castro que fue la que se comprometió en proteger a las mujeres, y sabemos que Mel Zelaya es un machista por excelencia, para él las mujeres no tienen valor y mucho menos consideración”.
En ese caso, ejemplificó que la matanza de las 46 reclusas que murieron en la cárcel de Támara, que a la fecha “no hay investigación, no hay culpables y ya eso quedó en el olvido. La viceministra de Seguridad (Julissa Villanueva) estaba a cargo de los centros penales y no pasó nada”.
Borjas también apuntó hacia los diputados del Legislativo que “desgraciadamente” los “mal llamados” padres de la patria “no están interesados” en bajar la incidencia delictiva. Solamente hay un interés por “concentrar el poder, violentar la Constitución y nombrar a sus afines en los entes persecutores del delito a sus achichincles que no los van a tocar a ellos”.
Para la ex congresista, las estadísticas que actualmente revelan los informes, sobre la reducción de muertes violentas son “falsas”, porque en Honduras “son expertos en maquillar cifras”.
