El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH) considera que la solicitud de “secretividad”, en el proceso que se lleva por la muerte violenta de tres mujeres en Roatán, Islas de la Bahía, no debe entenderse como sinónimo de impunidad.
El delegado Adjunto II del CONADEH, Ricardo López confía que la solicitud hecha por el Ministerio Público para que se declare la secretividad del proceso de investigación debe realizarse sin entorpecer el procedimiento de acceso a la información que tienen instituciones como el CONADEH.
Explicó que, como Institución Nacional de Derechos Humanos, con rango constitucional, el CONADEH puede conocer de los procesos de investigación, aunque se encuentren bajo la modalidad de “secretividad”, con base a la Ley.
“El hecho que este proceso este decretado en reserva o bajo secretividad no es sinónimo de impunidad”, reiteró.
Agregó que lo importante es que las autoridades del Estado, en primer lugar, realicen las investigaciones de manera seria, ya que la muerte de las tres mujeres ha tenido un impacto no solo en Roatán, sino que en todo el país.
Impacto que se ha agravado por la muerte de otras personas, en ese municipio, lo cual es alarmante porque se están dando indicios que, el 2024, puede ser un año muy violento para las mujeres en el país a juzgar por los sucesos ocurridos en los primeros días del mes de enero, que ponen en una situación complicada al Estado porque, evidentemente, se están vulnerando los derechos humanos.
Admitió que las autoridades tienen la competencia para poder realizar los procesos de investigación de manera secreta, siempre y cuando las pruebas recabadas sirvan para castigar con todo el peso de la Ley al o los implicados y, con ello, evitar que el crimen quede en la impunidad.
Indicó que el CONADEH va a darle seguimiento al proceso que realice tanto el Ministerio Público como el Poder Judicial, para evitar que este crimen se sume a la larga lista de impunidad en el país.
Desde el pasado 10 de enero, la Fiscalía Especial de Delitos contra la Vida y un equipo multidisciplinario de la Dirección de Medicina Forense y la Policía Nacional investigan la muerte violenta de María Antonia Cruz, Dione Beatriz Solórzano y Nikendra McCoy, cuyos cuerpos fueron encontrados en el interior de un vehículo ubicado en una propiedad privada, en Roatán, Islas de la Bahía.
Entre el año 2002 y el 2023, más de 8,100 mujeres perdieron la vida violentamente, es decir que, durante los últimos 22 años, el promedio es de una víctima diaria, cuyos crímenes estarían en la impunidad en más del 95 por ciento de los casos.
La muerte violenta de mujeres se intensificó, en el 2023, al registrarse cerca de 400 víctimas, en todo el país.
Durante ese mismo año, el CONADEH registró 44 escenas de muertes múltiples en las que perdieron la vida alrededor de 210 personas, de las cuales, alrededor de 80 eran mujeres.
En la primera quincena del 2024, al menos, 16 mujeres perdieron la vida en circunstancias violentas, 3 de ellas en una masacre en Roatán, Islas de la Bahía.
